Vistas de página en total

miércoles, 23 de enero de 2019

Antón Castro


Un artista en la vendimia

Realidad, memoria y autoficción para contar en Cariñena (2018) cómo el joven Antón Castro llega desde su Galicia natal a Zaragoza.

Foto José Miguel Marco

       Un adolescente de 19 años, tan inexperto como angustiado, se verá obligado a abandonar su tierra natal, Galicia, huyendo de un servicio militar obligatorio. Viaja a la ciudad de Zaragoza para convivir con un grupo de objetores de conciencia que, como él, se resisten a servir en el ejército; emocionalmente frágil, el joven es un tímido  aspirante a poeta, y durante algún tiempo irá anotando en un cuaderno Sagitario cuanto vive, siente y le ocurre con el propósito de transcribirlo cuando se cumpla su deseo de convertirse en un futuro escritor; una vez instalado en la ciudad, las circunstancias económicas le obligarán a viajar hasta Cariñena para, una vez allí, conseguir “engancharse” en la vendimia, donde descubrirá un mundo de sensaciones desconocidas para él hasta el momento, incluso el valor de algunas amistades que se han convertido en personajes de esta narración autobiográfica: Miguel Setién, Mar y Cris Gálvez, Andrés Serra, Eliseo el Riojano o Pepe Mainar.


       En Cariñena y en Paniza, pronto, el Gallego, como apodan al protagonista, establece relaciones en el pueblo; encuentra gente que le ayuda, o le puede dar el trabajo; unos personajes con sus pequeñas historias, que conviven en los escenarios de la plaza, en el bar, en un cobertizo, o en los barracones donde descansan. Y las  conversaciones, anécdotas, confidencias, la puesta en común de gustos, sobre todo culturales, de algunas películas de la época, libros, cantantes y cantoautores de moda, pero sobre todo muchos proyectos aún por definir. Y se constata el durísimo trabajo con el farcino en la mano, recorriendo las hileras de viñedos hasta deslomarse al sexto día, y quedar tronzado, abatido por el lumbago del cierzo. Al mismo tiempo, el narrador emplea párrafos bellísimos sobre la tierra, sobre la uva, y la técnica, la dura tarea y el esfuerzo de recogerla para dejarla suavemente sobre los cuévanos.

       Antón Castro utiliza una prosa limpia, delicada, con detalles eficaces que complementan las numerosas descripciones que el escritor hace sobre el paisaje y las gentes de la tierra, y todo ese esfuerzo se solidariza con el duro trabajo y la complicidad luminosa de un paisaje asumido con el paso de los años que, como se aprecia finalmente en este curioso texto, mitad ficción y biografía, resulta profundamente poético.






Antón Castro, Cariñena; Zaragoza, Pregunta Ediciones, 2018.

No hay comentarios:

Publicar un comentario