UN AÑO
GALDOSIANO
Carolina Molina publica, Los ojos de Galdós, en
Edhasa
Carmela Cid
decide, tras la muerte de su padre, que su futuro como escritora está bastante
limitado en Granada, y con el consentimiento de su madrastra Delmira deciden mudarse
a vivir a Madrid a la casa que, por herencia le ha correspondido a su hermano
Lolo, que vive en París, y con la excusa de cuidar del inmueble comenzar su aventura
literaria en la
capital. Espera volver a encontrase con Benito Pérez Galdós, a
quien conoció cuando le pidió que intercediera por su padre acusado de haber
provocado un incendio en la Alhambra aunque, una vez instaladas, sabrán que Galdós
como todos los veranos viajará a su finca de Santander, San Quintín, donde
encuentra frescor y es feliz recibiendo a sus amigos y escribiendo.
La joven
granadina deberá hacer algo para ganar algún dinero, y se encuentra con su admirada
Emilia Pardo Bazán, aunque su aspiración de ser periodista será bastante más
complicado por el simple hecho de ser mujer. La única forma de escribir para un
periódico es publicar crónicas de sociedad sobre pololos y corsés, y bajo un
seudónimo para que nadie sepa que es una mujer quién escribe. La llegada de
Carmela dará a don Benito una idea, sus ojos ya no son lo que eran, cada vez tiene
peor la vista, entonces le hará una proposición a Carmela que no podrá
rechazar, escribir sus memorias y para ese empeño necesita que alguien ponga
por escrito todo lo que ha vivido. De las conversaciones entre ambos surge el
relato, Los ojos de Galdós, donde se
irá desgranando sus aventuras, sus viajes, sus primeros pasos en la capital, y
las cosas que Carmela va investigando por su cuenta, incluido lo que vive con el
escritor en primera persona, se enterará de los problemas económicos que tiene
y le llevan a escribir día tras día sin tregua para poder comer y hacer frente
a las numerosas facturas. También conocerá todas o casi todas sus aventuras
amorosas, ya que el personaje, como queda reflejado en la novela, tiene mucho éxito
entre las mujeres.
Carmela
conseguirá ingresos regulares gracias a su pequeña columna, eso y su amistad
con Galdós le abrirá la posibilidad de conocer a los grandes escritores de la
época, convirtiéndose en protagonistas de la novela, entre ellas la periodista Carmen
de Burgos, y la
propia Emilia Pardo Bazán. El azar y la circunstancias harán
que no solo escriba una columna de sociedad sino que se introduzca en los actos
principales que van a llevarse a cabo en el Madrid de aquellos años. El lector
asiste a atentados, inauguraciones, elecciones y otros eventos que se
convierten en hitos memorables como el estreno de la primera obra de teatro de
Galdós, Electra, que hará que se
produzcan enfrentamientos por las calles de Madrid por la carga crítica que
lleva, y que cada uno lleva a su terreno. Madrid pronto se les hace grande a
las mujeres Cid e intentan volver a una Granada provinciana donde afloran los
chismorreos y las secretas condiciones de sus familiares que quieren ver casada
a Carmela, como corresponde al papel de la mujer, algo que la joven no piensa
hacer, al menos por el momento, siente que su actitud es como las pretensiones
de las mujeres que luchan por tener un papel importante en la vida por ellas
mismas, y a medida que leemos ella se irá transformando con el tiempo y crecerá
como persona, evolucionará en su actitud y forma de pensar y sentirá en sus
carnes lo que supone la independencia y la libertad femenina.
Ambientación
histórica
Carolina Molina ofrece
una singular ambientación histórica, nos
pasea por las calles de Granada, dibuja con precisión su mirada de La Alhambra,
subimos con ella por la acera del Darro, y paralelamente nos ofrecerá lo
crónica de los barrios madrileños y su curiosa transformación a comienzos del
siglo XX. Y al hilo de todo la imagen de un Galdós humano, un hombre sencillo,
humilde y apasionado que tuvo una vida muy prolífica y con respecto a la
literatura sobrados éxitos que le dieron fama, aunque murió ciego. Un abanico
de imágenes sobre el autor de los Episodios
Nacionales que descubre alguna que otra faceta desconocida y nos lo
devuelve a una actualidad cuando se cumple el aniversario de su muerte.
LOS OJOS
DE GALDÓS
Carolina Molina
Barcelona,
Edhasa, 2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario