… me gusta
LA INVENCIÓN DEL AMOR
La historia de
Samuel, el protagonista de esta nueva y singular novela de José Ovejero
(Madrid, 1958), no deja de resultar curiosa desde el principio porque su
existencia forma parte de ese aburrimiento de dudoso origen que afecta a
cuarentones que han llegado a esa edad maldita, sin cuestionarse cuánto ocurre
en su acontecer diario, e incapaces de mantener una relación estable durante
algún tiempo. Pero un día recibe una llamada muy extraña: alguien le comunica
la muerte en un accidente de coche de Clara, su amante. Sin duda, un dolorosa
noticia si no fuera porque él, nunca ha tenido relación con Clara alguna. Tras permanecer
unos instantes pensativo, y consciente de no haber conocido nunca a ninguna
Clara, decide acudir al tanatorio, donde pronto se verá envuelto en una
truculenta historia de la que no podrá salir con tanta facilidad como ha
entrado. Ajeno a cuanto allí sucede, conoce a la hermana de la difunta y urde
para ella una ficticia relación con Clara, movido por un dramatismo que irá
creciendo a medida que avanzamos en las páginas de La invención del amor (2013), una truculenta ficción a la que se
irán sumando una variedad de personajes que configurarán una peculiar y compleja visión de la conflictividad
psicológica humana.
Samuel se ve obligado a inventar
sus momentos, tanto privados como cotidianos, con su amante, y añadir algunas
de las vivencias que nunca se produjeron, toda una sucesión de mentiras que
hacen cambiar su percepción de la vida y de quienes estuvieron cerca de ella,
al tiempo que el narrador va describiendo los momentos íntimos del protagonista
junto a una mujer que nunca conoció. Todo esto obedece a una simple cuestión:
satisfacer la curiosidad de Carina, la hermana de la desaparecida Clara, que
parecía conocer a Samuel a través de un desdibujado retrato. Ovejero traza un
amplio retrato psicológico de la individualidad del triángulo amoroso, además
de otros que se van sumando a la escena y proporcionan al lector un auténtico
disfrute narrativo porque el madrileño completa sus observaciones existenciales
con una variedad de asuntos y perspectivas que conforman la densidad de la
novela, la identidad, las relaciones familiares y amistosas, el miedo y la
mentira, incluso el hastío en el trabajo que muestran muchos de los
planteamientos que inciden en nuestro cotidiano existir y se traducen en un
patetismo con ciertos tintes de una irónica visión de las cosas, y de un
marcado humorismo que deviene, según se mire, en cierta comicidad para afrontar
las anécdotas y situaciones a que se ve sometido Samuel, su protagonista; en
realidad, un ser de lo más perplejo, profundamente irresoluto en medio de una
sociedad que ha cambiado sus hábitos de conducta, se aleja de una auténtica
visión idealista y, sobre todo, de una voluntad creadora que exhibe una nueva
estirpe la sociedad contemporánea: el antihéroe.
Ovejero profundiza con su
escritura en el alma humana, ofrece una magnífica visión de una realidad, y
deja una pequeña puerta abierta al optimismo, porque al final de la novela el
autor pretende redimir a su personaje empeñándolo en la esperanza de una
entrega, ahora frente a una no menos atribulada Carina.
LA INVENCIÓN DEL AMOR
José Ovejero
Premio Alfaguara
de Novela, 2013
Madrid,
Alfaguara, 2013; 242 págs.
No hay comentarios:
Publicar un comentario